[REVIEW] Driveclub (offline)

viernes


 
Iba a ser uno de los títulos de lanzamiento y al final se ha demorado casi un año, y todavía faltarán unos días para que los servidores se encuentren operativos y podamos valorar el juego con todas las de la ley. De momento, y gracias a Sony, hemos podido probar lo que va a ser el juego completo aunque sea un decir. Y es un decir porque hasta que no se arreglen esos problemas de conectividad solo tendremos acceso a la mitad de lo que va a ser el juego, y la experiencia así queda un poco coja sin poder crear clubes o ver lo que hacen nuestros amigos.


Lo solitario no mola, ser social es lo que se lleva y también lo que le da sentido a este Drive Club, y aunque parezca un mal título de un libro de Jane Austen, no hay “sentido sin sociabilidad”. Pero como no hay mal que por bien no venga, podemos aprovechar esta circunstancia para tener una perspectiva real de otras cosas del juego y de lo que mas adelante podría aportar ese componente, de lo importante que es para DriveClub. De momento cojamos lo que hay ahora por el mango…

Primero de todo, debéis tener claro que DriveClub no es un simulador de conducción pero tampoco es un juego marcadamente arcade. En este sentido se trata de un concepto muy similar al visto, por ejemplo, en Project Gotham Racing. Es decir, la respuesta del coche es realista pero el control es accesible y directo, que además permite mucho margen de maniobrabilidad a la hora de corregir sobre la marcha los posibles errores de conducción que podamos ir cometiendo. En general es divertido conducir por los circuitos de Drive Club, y simple, ya sea haciendo trompos, apurando la frenada o intentando ajustar el trazado aprovechando los pianos. Obviamente la peor parte se la llevan las primeras carreras. Lo coches de menor gama son menos susceptibles de explotar todas estas cosas, pero son necesarios para que la curva de aprendizaje sea adecuada. Luego, la cosa mejora considerablemente.
Lo que mas sorprende del juego es su actitud, o esas agallas a la hora de querer que nos divirtamos de la forma mas sencilla posible. Hay mucho descaro. DriveClub no se baja ni las bragas cuando encendemos la consola y entramos al juego. Solo quiere que nos divirtamos y nos pongamos a ello rápido, sin ningún tipo de complicaciones. Incluso antes de llegar al menú principal ya estaremos corriendo nuestra primera carrera, sin tutoriales ni prolegómenos, ni juegos previos ni nada que desvíe nuestra atención sobre lo que realmente importa. El ejemplo mas gráfico que podemos poner respecto a esto es que el modo principal de juego se llama simplemente “A conducir”, y que en apenas un par de pasos ya estaremos en mitad de la calzada rodeado de otros once coches. Un aquí te pillo aquí te mato continuo en toda regla.

Donde realmente DriveClub centra su atractivo es en el cumplimiento de retos y en hacerlo mejor que nuestros amigos. Aunque de momento esto último no podamos comprobarlo, el juego si trae de momento algunos retos de serie para ir matando el gusanito. El modo en solitario dispone de un puñado de carreras (no demasiadas todo sea dicho) que nos permitirán ir desbloqueando coches, vinilos y consiguiendo puntos XP para ir subiendo de nivel. Todas nuestras acciones en la carretera quedarán registradas, de tal modo que un buen trompo nos sumará puntos y un mal toque con un contrincante nos los quitará. Al final de la carrera todo ese cómputo de puntos pasarán a nuestra cartera general e iremos desbloqueando cosas. De todos modos lo importante no tiene porque ser ganar. Lo más importante suele ser la consecución de objetivos que son realmente los que nos permitirán seguir avanzando en el juego. Por ejemplo, de nada sirve ganar una carrera si los objetivos de la misma eran conseguir cierto número de puntos trompeando en una determinada curva, hacer tal o cual sección de manera perfecta o alcanzar en algún momento una velocidad mínima previamente establecida. Los objetivos suelen ser muy variados, y ya hemos visto este sistema de progreso en otros juegos como el Need For Speed: Rivals.

Esto último sería otro ejemplo de lo sencillo que es ponerte a conducir en DriveClub. No apuesta de buenas a primeras porque seas el más rápido. Primero concentra toda su atención en la guarnición, y mas adelante ya se preocupará del plato principal y de conseguir que seas el más rápido. Aquí no hay frustraciones, no hay falsas sensaciones de no ser capaz de hacerlo y no hay carreras de relleno que dejamos en plata o bronce por creernos incapaces de sacarnos el oro, al menos no al principio. Tal es su sencillez y su apuesta por este tipo de cosas tan “gameplayeras”, que en ocasiones peca de ingenuidad fuera de la verdadera chicha. No hay ningún tipo de configuración para el coche, ni mecánica ni visual, ni siquiera el color. Elegimos el coche y a correr. Lo más configurable en este sentido es que podremos elegir entre cuatro vinilos predeterminados o el de nuestro club, y a esos si que se les puede cambiar el color, pero nada mas. El aspecto del conductor es configurable pero de una manera un tanto chusca. Ocho cabezas y cinco camisetas entre las que elegir no parece que den para muchas variantes…
Pero lo cierto es que engancha, a pesar de que no hayan muchas cosas que hacer entre el modo principal, las pruebas de contrarreloj y las de derrapes. Aparte de por ser tan sencillo y directo, gran parte de esta culpa la tiene esa filosofía de premiarte por todo. Terminar una carrera significa premio. Conseguir un objetivo significa premio. Si consigues los tres objetivos te hacen una estatua debajo de casa. Los trofeos saltan cada dos por tres y cada vuelta a los menús al terminar una carrera supondrá, a buen seguro, un buen puñado de vinilos y probablemente coches mejores. Ya veremos, cuando consigamos desbloquearlo todo, en que se concentra su atractivo. Imagino que en superar a tus amigos y en hacer cosas para tu club, pero eso de momento son meras suposiciones…

Técnicamente el juego es presuntuoso a ratos. En general podemos quedarnos embobados con ciertos detalles como el modelado de los coches o el realismo de la cámara interior. Los efectos de luces son sin duda lo mejor. Desde los reflejos en la carrocería hasta los destellos del sol, sin desmerecer el efecto del deslumbrado o la ambientación del día dependiendo de la hora a la que corramos. Hay mucha pomposidad en este sentido y mucho adorno para favorecer el espectáculo, como confeti o cohetes pirotécnicos al finalizar algunas carreras…

Sin embargo, y a pesar de que haya variedad de entornos, en términos generales se ve todo un poco soso, todavía con margen de relleno. Los circuitos (inventados) se encuentran muy vacios, con poca gente en los laterales y pocos elementos de adornos cercanos, como si hubiesen echado alquitrán en medio de la nada y luego se hubiesen ido completando colocando vallas y algunas protecciones. Como si todavía se encontrasen en proceso de construcción o hubiesen realizado un trazado improvisado en una vieja carretera abandonada. Hay un gran predominio por los entornos naturales así que durante prácticamente todo el rato lo único que veremos será monte y paisaje. No hay ciudades, ni grandes edificaciones, ni ningún otro tipo de rutas que hagan que la pantalla se llene. Normal que el motor gráfico se muestre tan robusto. Que sí, que no recurre a trucos de fondos planos y todo está realizado en 3D, pero a algunas partes bien podían haberle metido un buen meneo.
También se echa un poco de menos la suciedad de la carrera, ese malsano olor a goma quemada, grasa y partículas de gasolina que contaminan el ambiente. Las carreras tienen un cierto tono burgués, pero no en el sentido competitivo de la palabra, si no ambiental. Les falta la agresividad y la contaminación visual que Evolution Studios si que supo imprimir a sus excelente saga Motorstorm. Los coches se aboyan y se rallan, pero el efecto es igualmente burgués. Incluso el sonido es muy secundario, a pesar de que tenemos que reconocer que si tenemos un Home Cinema será fácil saber si tenemos o no un coche detrás. El Dolby en este sentido está excelentemente implementado.

Y básicamente esto es todo lo que podremos hacer con DriveClub si los servidores están caidos, no tenemos conexión online o no tenemos amigos que dispongan del juego. La dependencia de una conexión es continua, y se nota en todas y cada una de las partes del juego que no dejan de dar errores cuando intenta acceder a un servidor que no se encuentra disponible. El “Internet” será pues, bastante obligatorio para sacarle partido.  Por el momento, podemos disfrutar de un juego divertido, sencillo y muy directo, aunque con pocas posibilidades extra para entretenernos fuera de lo que es la carrera. Estaremos pendientes de esos dichosos servidores para saber, de una vez por todas, de lo que es capaz el jueguecito. Entonces ampliaremos este artículo. Sin bromas.


ACTUALIZACIÓN: La review relativa a los modos sociales y online puedes verla desde AQUI.

3 comentarios:

  1. Perfecta review que te has marcado con el escaso material que te han dado. ..

    Por que manda narices que un juego que lleva casi un año de retraso, lo lancen a medias, y más viendo lo que comentas encel análisis que es precisamente el online su principal atractivo. ..o por lo menos donde gira todo el embrollo.

    A mi este juego me daba buena pinta y, por lo que comentas, parece un juego de coches pensado para mi jajaja. Que yo soy el típico al que le cuesta sacarse los oros en los juegos de conducción. ...

    Por lo demás, no se por que me daba en la nariz que gráficamente no iba a ser rompedor. ..seguimos con la tónica de esta new generation...venga, poco a poco no vaya a ser que nos quedemos ciegos con tanto despliegue gráfico. ..

    Pues nada, esperaremos a ver esa otra mitad del análisis y confiemos en que mejore lo presente.

    ResponderEliminar
  2. Análisis impecable, y algo suave en mi opinión, para la polémica que ha levantado Driveclub. Todo lo que rodea a este juego es de auténtica vergüenza. Nos han vuelto a poner cara de póker al anunciar, casi 24h antes del día, que la versión gratuita para los usuarios del psplus se atrasa de manera indefinida.

    Le tenía ganas a este juego, más que nada por volver a coger el mando de mi PS4, pero no sé que pasa en esta "next-gen" que todo va fatal. Es como si todos estuvieran agazapados, esperando a ver quién suelta qué juego, esperando todos a ver quién pega un bombazo. Y lo único que parece es que estén pegando palos de ciego.

    Y encima la versión comercial no puede hacer uso de su modo estrella, el multijugador, porque el servicio DE PAGO online no da más de sí. Insisto, una vergüenza. Gráficamente por lo que decís no es nada del otro mundo. Y eso que era algo de lo que han ido ¿presumiendo? con cada vídeo que soltaban. Con razón cada vez leo de más gente que se vuelve al PC. Tengo una PS4 que no la toco hace meses.

    Nos podremos quejar mucho de Nintendo (yo el primero), pero objetivamente, ahora mismo WiiU es la consola de nueva generación con mejores juegos exclusivos. En nada sale ya Bayonetta 2, otro Zelda, etc... Sony y Microsoft parece que andan a dos velas, y para los pocos exclusivos que tienen, van soltando cagadas monumentales como con este Driveclub.

    ResponderEliminar
  3. Gracias chicos.

    Este fin de semana le he estado metiendo un poco mas y me reitero sobre lo dicho en la review, los efectos de luz son una pasada. Me tocaron correr bastantes carreras de noche, y si no era de noche, al final, con el paso del tiempo, se acababan haciendo de noche. Puede que a los faros les falte un poco de intensidad, pero en general todos los efectos son magníficos. Hasta la luz de freno. Sobre todo la luz de freno…

    También me reitero sobre lo simple de muchos de los circuitos. He conducido por algunos sitios por los que estoy seguro de haber pasado cruzando la sierra de León. Joder si parecía que me iba a salir un corzo en cualquier momento…

    Por otro lado, tras tres actualizaciones (1.03), el tema online sigue chungo.

    Ayer se me conectó un momento pero habían cuelques continuos. Imposible andar así. Lo mas que pude hacer fue meterme en una carrera online entre equipos (que me costo 15 minutos entrar) y cuando se acabo la carrera se me colgó y no se me volvió a conectar en todo el día. Bravo ¬¬

    ResponderEliminar