[CRITICA] Marte (The Martian)

Y ya es la segunda vez que se queda tirado. Se lo encontró Matthew McConaughey en un remoto planeta  en Interstellar y ahora vuelve a quedarse colgado en Marte. Vaya suerte la de Matt Damon, que gracias a sus conocimientos botánicos de cultivación de marihuana y coprofagia tiene que conseguir sobrevivir en un planeta hostil. Al menos hasta que alguien se dé cuenta de que sigue vivo y, mas importante, quiera volver a por él, que esa es otra. La última cinta de Ridley Scott está lejos de sus grandes obras de ciencia ficción (Alien, Blade Runner), pero no deja de ser una buena propuesta para ir al cine .

Me encuentro un poco en situación de desconcierto, debatiéndome entre lo bien que está ejecutada la película y lo que me hubiera gustado ver en ella. Respecto a lo primero hay que decir que se nota la maestría de Ridley Scott en la planificación de los tiempos y los acontecimientos, lo que para el espectador resultará sin duda muy complaciente. Sus 140 minutos no se hacen pesados y excepto algún momento puntual de tedio, lo cierto es que se trata de un film bastante digerible y entretenido. En este sentido me gustaría saber si es digerible precisamente por no incluir esos elementos que a mí me hubieran gustado ver, aunque supongo que siempre me quedará la duda.

Como decía la película es llevadera, y es llevadera por los elementos que se introducen para que sea así. Primero porque las imágenes del planeta son absolutamente hipnóticas y espectaculares, y segundo porque el personaje principal utiliza el humor para quitarle hierro al asunto y el film transcurre en una sucesión de problemas y adversidades y en cómo posteriormente se les da solución. En este sentido no hay tregua. Curiosamente, la mejor manera de inspirarse que tiene Matt Damon parece ser hablándole a una cámara en plan gran hermano, aunque en realidad solo es una manera de que el espectador se entere de que es lo que está pasando porque la grabación, lo que se dice el video de esas conversaciones, no acaba en ningún lado. Hay música ochentera que ameniza algunos momentos y desde la Tierra todo es un cúmulo de teorías y cálculos para traer a una persona de vuelta que está a millones de kilómetros de su hogar (ya me gustaría saber a mi que esfuerzos se pondrían en esa labor si realmente se diese esa circunstancia). Cierto es que a veces es inevitable torcer un poco el gesto, pero como la mayoría no somos científicos y vamos al cine a estar entretenidos, pues se aconseja ir a ver la película con un poco de manga ancha.

Sin embargo, y a pesar de que salí de la sala muy satisfecho, me habría gustado mas profundidad en otro tipo de enfoque. Se supone que hay una persona sola en todo un planeta y apenas se ahonda en ese hecho. Podría haber sido una buena oportunidad para mostrar, de la forma mas legítima y obvia posible, la angustia de la soledad extrema y el trastorno que eso podría provocar. En cambio, al marciano solo le sale barba y se quita unos kilitos de encima, como Tom Hanks en “Naufrago” pero en versión happy. Quizás el señor Damon utilice el humor y el optimismo como forma de afrontar la situación, pero en ningún momento vemos un personaje abatido por su mas que probable muerte. Todo es positivismo. Lo que podía haber sido un papel dramático en plan “Gravity” (parece mentira pero Sandra bullock estuvo genial en ese papel), se ha acabado pareciendo mas a un monologo de “Leo Harlem”.

Lo que digo yo es que “The Martian” es una película sobre como traer a un hombre a la Tierra si se encuentra en un planeta muy lejano, pero no es una película que dé demasiada importancia al hecho de que ese hombre se encuentre solo. Falta cierta trascendentalidad. No hay casi rastro de lo que significa esa circunstancia, y es una pena porque al menos podría haberle otorgado una dimensión extra, muy diferente a la del simple hecho de que somos humanos, somos la leche, y podemos conseguir traer a un hombre de vuelta desde donde nos dé la gana. El Kit de la cuestión es sencillamente ese, ya que ni siquiera llegamos a conocer mucho de las vida personales de los personajes, que al final acaban resultando también planos, incluyendo al protagonista.

En matices profundistas en el espacio, creo que tanto Interstellar y Gravity le pegan un repasito en ese sentido ya que tienen bastantes mas lecturas. Eso si, The Martian no desmerece en absoluto y es posiblemente el mejor trabajo de Ridley Scott desde aquella comedia negra que personalmente me pareció genial; Los impostores. Y hablo del año 2003…

SINOPSIS

Durante una misión tripulada a Marte, el astronauta Mark Watney es dado por muerto tras una terrible tormenta y abandonado por la tripulación, que pone rumbo de vuelta a la Tierra. Pero Watney ha sobrevivido y se encuentra atrapado y solo en el hostil planeta rojo. Con suministros escasos, deberá recurrir a su ingenio y a su instinto de supervivencia para encontrar la manera de comunicar a la Tierra que sigue vivo. (FILMAFFINITY)